domingo, 14 de febrero de 2010

Evangelio del Día

domingo 14 Febrero 2010


San Cirilo , San Valentin



Leer el comentario del Evangelio por
Pablo VI : «Dichosos los pobres, porque vuestro es el Reino de los cielos»

Lecturas

Jeremías 17,5-8.
Así habla el Señor: ¡Maldito el hombre que confía en el hombre y busca su
apoyo en la carne, mientras su corazón se aparta del Señor!
El es como un matorral en la estepa que no ve llegar la felicidad; habita
en la aridez del desierto, en una tierra salobre e inhóspita.
¡Bendito el hombre que confía en el Señor y en él tiene puesta su
confianza!
El es como un árbol plantado al borde de las aguas, que extiende sus raíces
hacia la corriente; no teme cuando llega el calor y su follaje se mantiene
frondoso; no se inquieta en un año de sequía y nunca deja de dar fruto.


1 Corintios 15,12.16-20.
Si se anuncia que Cristo resucitó de entre los muertos, ¿cómo algunos de
ustedes afirman que los muertos no resucitan?
Porque si los muertos no resucitan, tampoco Cristo resucitó.
Y si Cristo no resucitó, la fe de ustedes es inútil y sus pecados no han
sido perdonados.
en consecuencia, los que murieron con la fe en Cristo han perecido para
siempre.
Si nosotros hemos puesto nuestra esperanza en Cristo solamente para esta
vida, seríamos los hombres más dignos de lástima.
Pero no, Cristo resucitó de entre los muertos, el primero de todos.


Lucas 6,17.20-26.
Al bajar con ellos se detuvo en una llanura. Estaban allí muchos de sus
discípulos y una gran muchedumbre que había llegado de toda la Judea, de
Jerusalén y de la región costera de Tiro y Sidón,
Entonces Jesús, fijando la mirada en sus discípulos, dijo: "¡Felices
ustedes, los pobres, porque el Reino de Dios les pertenece!
¡Felices ustedes, los que ahora tienen hambre, porque serán saciados!
¡Felices ustedes, los que ahora lloran, porque reirán!
¡Felices ustedes, cuando los hombres los odien, los excluyan, los insulten
y los proscriban, considerándolos infames a causa del Hijo del hombre!
¡Alégrense y llénense de gozo en ese día, porque la recompensa de ustedes
será grande en el cielo. De la misma manera los padres de ellos trataban a
los profetas!
Pero ¡ay de ustedes los ricos, porque ya tienen su consuelo!
¡Ay de ustedes, los que ahora están satisfechos, porque tendrán hambre! ¡Ay
de ustedes, los que ahora ríen, porque conocerán la aflicción y las
lágrimas!
¡Ay de ustedes cuando todos los elogien! ¡De la misma manera los padres de
ellos trataban a los falsos profetas!


Extraído de la Biblia, Libro del Pueblo de Dios.



Leer el comentario del Evangelio por

Pablo VI, papa de 1963 a 1978
Exhortación apostólica sobre el gozo cristiano « Gaudete in Domino »

«Dichosos los pobres, porque vuestro es el Reino de los cielos»

El gozo de permanecer en el amor de Dios comienza ya aquí abajo. Es el
del Reino de Dios. Pero se concede dentro de un camino escarpado, que pide
una total confianza en el Padre y en el Hijo, una preferencia por el Reino.
El mensaje de Jesucristo promete ante todo el gozo, este gozo exigente; ¿no
se abre con las bienaventuranzas? «Dichosos los pobres, porque vuestro es
el Reino de los cielos. Dichosos los que ahora tenéis hambre porque
quedaréis saciados. Dichosos los que ahora lloráis porque reiréis». Misteriosamente, el mismo Cristo, para arrancar de raíz del
corazón del hombre el pecado de suficiencia y manifestar al Padre una total
obediencia filial, aceptó morir a manos de los impíos, morir en una cruz.
Pero... desde entonces Jesús está vivo para siempre en la gloria del Padre
y por eso los discípulos se llenaron de un gozo imperecedero al ver al
Señor al atardecer de Pascua (Lc 24,41). Ahora, aquí abajo,
el gozo del Reino realizado sólo puede brotar de la celebración conjunta de
la muerte y de la resurrección del Señor. Es la paradoja de la condición
cristiana que ilumina de manera singular la condición humana: ni la prueba
ni el sufrimiento se eliminan de este mundo, pero cobran un nuevo sentido
con la certeza de participar de la redención obrada por el Señor y
participar de su gloria. Por eso el cristiano, sometido a las dificultades
de la existencia común, no por ello queda reducido a buscar su camino a
tientas, ni ver en la muerte el final de sus esperanzas. Tal como lo
anunció el profeta: «El pueblo que caminaba en tinieblas vio una luz
grande; habitaban tierras de sombras, y una luz les brilló. Acreciste su
alegría, aumentaste su gozo» (Is 9, 1-2).




Puede modificar su suscripción en cualquier momento : www.evangeliodeldia.org


El Evangelio del Día es sin cargo, sin anuncios de carácter comercial y sin
fines lucrativos por uso de nuestros ficheros. El Evangelio del Día puede
existir solamente gracias a su generosidad espontánea y a la de los
voluntarios. La meta del Evangelio del Día : permitir al máximo número de
personas de recibir la Palabra de Dios.
---------------------------------------------

La vida del Santo está disponible al hacer un clic en su nombre: se abre la
ventana con su historia.
---------------------------------------------

Para escribirnos, los invitamos a ELEGIR EL TEMA del correo en el menú «
CONTACTO » de la página http://www.evangeliodeldia.org o copiando en su
navegador :
http://www.evangeliodeldia.org/main.php?language=SP&module=contact. Al
elegir CON PRECISION el tema de su correo, nos ayudan a contestarles
rapidamente.
---------------------------------------------
El Evangelio del Día es enviado cada día a más de 480.000 personas en el
mundo, en 10 idiomas.
---------------------------------------------
Para participar a los gastos del Evangelio del Día, puede contribuir en
DOLARES o en EUROS a la dirección :
http://www.evangeliodeldia.org/main.php?language=SP&module=donation,
cualquier sea su donativo, salvo que tenga una tarjeta normal o VISA. Sirve
para el desarrollo de nuevas versiones del Evangelio del Día.

No hay comentarios: